Trás más de 10 años de experiencia, hemos visto infinidad de errores en nuevas páginas web.

Muchos de ellos se cometen por diseñadores con falta de experiencia.

Inclusive, por crear el tipo de web que no necesitaba el cliente.

¿Quieres evitarte problemas fácilmente?

Lee estos consejos y evita temores.

Todo el mundo utiliza su smartphone para Internet

Desde 2010 y con la llegada a nuestras vidas de Whatsapp todo cambió.

Empezamos a utilizar móviles cada vez más potentes y con tarifas de datos más económicas.

Más de la mitad de las personas acceden desde su teléfono o tablet a una página web más directamente que desde su ordenador.

¿Será por qué lo llevamos todo el día en nuestro bolsillo?

Facilitemos la vida al usuario y nuestro potencial cliente. Permitamos que pueda ver toda nuestra información y nos contacte desde su smartphone.

Considera como vital que tu web sea responsive y que no importe si entra desde un teléfono de 4, 5 o 6 pulgadas.

Lo que realmente importa es que sea accesible para todos y en todas partes.

Optimizar la navegación y la velocidad de carga

Pensemos que los usuarios de Internet tienen poco tiempo en su día a día.

Esto hace que nos planteemos que nuestra web debe de funcionar rápida y a la primera.

Con toda la información bien organizada y a pocos “clics” desde donde se inicie la visita.

Cuanto:

• Menos tiempo tarde en cargar = Mejor posición en Google
• Más fluida y organizada sea la navegación = Mayor sensación positiva del usuario
• Menos errores en la página web = Menor frustración para el potencial cliente
• Menos problemas visuales = Mejor imagen del negocio

La seguridad debe estar presente si o si

¿Te gustaría viajar en un coche sin cinturones, sin ABS, ni airbag? Seguro que no.

Tu web está expuesta a miles de ataques de piratas informáticos a diario.

La seguridad es fundamental para prevenir y curar.

La seguridad activa previene que alguien malintencionadamente acceda tu casa en Internet.

Protege los puntos de vulnerabilidad con actualizaciones de tu sistema y sobre todo con mucho sentido común, como por ejemplo en el momento de escoger tu contraseña.

La seguridad pasiva es la que actúa cuando sucede el problema.

No podemos olvidarnos de las copias de seguridad diarias, con las que recuperar todo lo que pueden habernos borrado.

Orienta el aspecto visual para tu cliente

Te representa a ti y a tu negocio un logotipo y unos colores. ¿Por qué no vas a utilizarlos en tu propia web?

Una página web debe de representarnos en Internet y, al igual que escogiste un diseño para tus instalaciones o tu imagen personal.

Bien sabes que una imagen vale más que mil palabras.

¿Acaso la gente no se guía inicialmente de lo que le entran por los ojos?

Pónselo fácil para que identifiquen tu web con un sector que ya conocen y que les aporte confianza visual.

No es lo mismo:

• Crear una página web para un servicio funerario que para una guardería.
• La imagen que representa un restaurante, que la que comunica una clínica de fisioterapia.

Piensa en lo que transmite su negocio físico y tu sector para idear la imagen que tu web deberá representar.

La regla de los 3 clics

Tan cierto como que hoy has descubierto algo que no conocías.

Esta regla explica que un usuario estará satisfecho en encontrar lo que busca en una web sólo con hacer tres clics.

Organizar los menús de navegación de forma óptima o los artículos de un ecommerce lleva tiempo, pero es muy rentable.

Si añades demasiados pasos en tu web te arriesgas a aburrir al visitante.

Ponlo fácil y de manera intuitiva.

En resumen

1. Si o si a webs pensadas para dispositivos móviles
2. Mejora el tiempo de carga y evita errores de navegación
3. Securiza tu web y duerme bien por las noches
4. Seduce visualmente a tu cliente potencial
5. No más de 3 clics

PD: ¿Preparado para poner tu web en marcha y atraer más clientes?

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