La realidad aumentada ha logrado crear un boom muy grande dentro de la publicidad. Esta revolución ha logrado que muchos anuncios no sólo tengan un impacto eminentemente mediático sino social.
Se trata de avisos que no podrían ser más elocuentes con eso de “acercar mucho más al cliente”, porque se trata simplemente de una campaña de visualización realmente asombrosa. La manera de asimilar este tipo de divulgación depende mucho de lo que los clientes esperan con respecto a un tipo de producto. Si por ejemplo quieren algo relacionado con deportes, moda, ciencia, etc., esa realidad aumentada tiene que tener la capacidad para lograr una compenetración con el público.
Hace unas temporadas, los conceptos de ganancia alrededor de la realidad aumentada fueron del orden de los 5.6 millones de euros en 2009. De acuerdo con una proyección de ABI Research, éste tipo de servicio logrará facturar en 2014 un total de 247 millones de dólares.
Una de las maneras más impactantes teniendo como base esta categoría informativa llega de parte del sistema Goldrun. Goldrun es un tipo de publicidad aumentada que permite la interacción con el público mediante la exposición de una palabra, un objeto (esto es lo más común) o una persona virtual.
Es como si los anuncios de los carteles publicitarios cobraran vida por sí mismos. Pero algo que hace más interesante este tipo de armonía con el público, es que los resultados de la interacción se pueden compartir en Facebook.
Es decir, si tú tienes la oportunidad de tener un dispositivo electrónico conectado a la red social, Goldrum te permite automáticamente ingresar a tu perfil para que les muestres a tus contactos tu experiencia con esta publicidad. Una de las campañas realizadas con Goldrum el año pasado fue la de H&M en Manhattan. Una empresa de calzado deportivo llamada Airwalk también empleó este método para que en la calle y a través de una de sus muestras de realidad aumentada… ¡los transeúntes pudieran comprar calzado por Internet! Pero si esto es en plena vía pública, los resultados a nivel personalizado no dejan de ser sorprendentes.
En 2009, la prestigiosa revista de temas alternativos Esquire haciendo uso de una aplicación llamada QR – Quick Response Barcode –, logró que los lectores de la revista pudieran ver una realidad aumentada, ¡sobre el papel!
Los usuarios tenían que tener una webcam para poder visualizar este efecto tan sorprendente, en el que se veía al actor Robert Downey Jr. quien aparecía en la portada sentado y como si estuviese a sólo dos metros de la persona. Y no sólo la imagen de él sino todo el texto, cobrando animación, para leer el artículo en el aire.
Otra compañía que ha hecho uso de manera ingeniosa de la RA -realidad aumentada-, como se le conoce en el argot tecnológico pero esta vez utilizando Internet, es la empresa del automóvil Fiat. Allí, los usuarios podían crear su propio anuncio de televisión usando una webcam simulando conducir uno de sus modelos.
¿Hasta dónde llegará este ingenio?. Deja más abajo tu opinión.
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